Nueva luz para la arqueología iluminada de Pompeya

La iluminación nocturna de la zona arqueológica de Pompeya, concebida para las visitas abiertas al público de todo el mundo, aprovecha la experiencia de 17 años en el campo de la iluminación artística del Grupo Enel, una experiencia que incluye en su portafolio algunos de los monumentos más famosos del mundo, como el Panteón de Roma, la Torre de Pisa y el Alcázar de Sevilla. Tampoco faltan obras pioneras como el Ponte Cittadella de Richard Meier en Alejandría, así como edificios menos conocidos pero del todo valorizados justamente por la luz de Enel: por ejemplo en Madrid el Palacio de Amboage, sede de la Embajada de Italia, en Bucarest la Aheneul, la sala de conciertos desde siempre reconocida por la acústica que acaricia el oído del espectador y ahora también por la luz que captura su mirada.

Pero Pompeya es algo distinto. La definición de "sitio único en el mundo" se ajusta al área arqueológica al pie del Vesubio como ningún otro lugar o monumento; la sensación de tocar con mano la gran historia romana, las obras maestras del arte clásico, junto con el poder aterrador de la naturaleza, no puede compararse con ninguna otra cosa.

El único toque que podía añadirse a la experiencia era la posibilidad de una visita nocturna, bajo el dulce cielo veraniego de la Campania: el resultado un encanto difícil de describir, gracias a la sabia dirección de Enel, que ha sabido cuidadosamente poner de manifiesto el valor más intenso de caminos, columnas y ruinas sin abrumarlos con elementos extraños, sino más bien poniéndolos al servicio del arte.

Por otra parte, la protección y valorización del patrimonio histórico, artístico y monumental son parte de la misión de Enel en los países en los que está presente.

El objetivo principal de la tecnología sólo puede ser la mejora de la vida de las personas y, en particular, la satisfacción de su sentido estético y espiritual.

El proyecto técnico y artístico, llamado "Una noche en Pompeya", invita a los visitantes a seguir un camino de luz que de la Porta Marina Superiore continúa a través de las tiendas de Via Marina, el templo de Apolo, el Foro, el Templo de Vespasiano, el Macellum y los edificios públicos, hasta llegar a la Basílica: un recorrido en el que el espectador se encuentra siempre entusiasmado, acompañado en cada paso de las smart solutions de Enel.

 

"El nuevo sistema de iluminación de Pompeya es otro paso importante en el renacimiento de un sitio arqueológico único en el mundo. Gracias al juego de luces sugestivo, las líneas y formas de las ruinas ahora brillan con renovada belleza", comentó Darío Franceschini, ministro de bienes y actividades culturales y turismo, quien intervino en la ceremonia de inauguración.

"Creo que este camino de sonidos y luces dará la vuelta del mundo: la postal de una Italia bella y en el mismo tiempo contemporánea, que combina el desarrollo y la tradición", agregó Carlo Tamburi, Director Country Italia Enel. Una Italia que, gracias también a la luz de Enel, muestra los tesoros más preciados de su excepcional riqueza histórica. Y hablando de historia, Carlos de Borbón nunca vio la finalización de las excavaciones arqueológicas de Pompeya ni menos aún la luz de Enel, pero sin duda sería orgulloso: el Iluminismo que le inspiraba por fin ha encontrado correspondencia en una iluminación al alcance de todos los ciudadanos.