¿Para qué sirven las baterías de segunda vida?
¿Cuál es el proceso de reciclaje de baterías?
Cuando una batería de un vehículo eléctrico llega al final de su «primera vida», hay tres opciones para su «segunda» vida:
- Una opción es la reutilización, en la que se seleccionan y combinan varios envases adecuados en función del estado residual, la capacidad, etc.
- Cuando una batería de un vehículo eléctrico llega al final de su «primera vida», hay tres opciones para su «segunda» vida:
- Una opción es la reutilización, en la que se seleccionan y combinan varios envases adecuados en función del estado residual, la capacidad, etc.
Los paquetes reutilizados y renovados pueden emplearse en aplicaciones estacionarias que promuevan la asequibilidad, la eficiencia energética, el respeto al medioambiente y la sostenibilidad.
El proceso de reciclado de una «batería de segunda vida» consiste en extraer los materiales valiosos de las baterías usadas de los vehículos eléctricos: litio, cobalto, níquel y manganeso. Dado que se espera que la demanda de vehículos eléctricos experimente un crecimiento de dos dígitos durante la década actual, se prevé que la necesidad de litio y cobalto se multiplique por ochenta y cincuenta, respectivamente, de aquí a 2030.
¿Cuáles son las principales ventajas del reciclaje y la reutilización de baterías?
Las baterías de segunda vida tienen claras ventajas medioambientales tanto en la fase de extracción como en la de eliminación. Estas incluyen:
- Una reducción de la extracción de minerales y un aumento de la conservación de los recursos, evitando así que se sigan agotando los minerales de la Tierra y evitando el procesamiento de materiales con un alto consumo de energía y emisiones.
- Reducción de los residuos vertidos al medioambiente
- La reutilización de materiales una vez reciclados.